“La simplicida es la mejor manera de hacer arte”

Rafael Ramos Losada – Ex director de RNE y doblador/creativo de cuñas.

Rafael Ramos Losada se introduce en el mundo de la publicidad radiofónica en pleno auge de la publicidad radiofónica, con tan solo 25 años. En aquel momento y hasta final de los setenta, en nuestro país, la radio era el medio idóneo para los productos de gran consumo, proporcionaba la máxima cobertura y notoriedad.

Dos años después de la fusión de RNE y TVE en un órgano centralizado RTVE, Rafael Ramos Losada pasa a ser director de RNE, 1975-1978.  A lo largo de su mandato, desaparece el monopolio informativo de RNE y se suprime la obligatoriedad de conexión con los diarios hablados; nace la nueva emisora Radio Exterior de España (REE); desaparece la red comercial de Radio Peninsular y se elimina la pausa nocturna de 2:00 a 6:00. En febrero, inicia sus emisiones el Tercer Programa, actualmente Radio 3, una cadena cultural y musical que presenta una oferta alternativa a las programaciones convencionales y radio fórmulas musicales.
El 20 de enero de 1978, a raíz del último reajuste de directivos en RTVE, el señor Ramos Losada fue confirmado en su puesto, al que se le añadió el nuevo cargo, de director gerente. Rafael Ramos Losada pidió en marzo de ese mismo año ser relevado de su puesto «a causa de la creciente politización de que estaba siendo objeto el medio y por motivos profesionales».

  • ¿Usted era periodista pero se introdujo en el mundo de la publicidad cómo surgió?

Pues surgió por casualidades de la vida, como suelen decir. Mi mejor amigo en esos tiempos necesitaba ayudar a un amigo. Siempre he sido buen escritor, así que empezamos con favores a amigos y al final a la gente les terminó gustando nuestras ideas. La verdad es que no lo esperaba, en absoluto.

  • ¿Había profesionales como los hay ahora o eran habituales los casos como el suyo?

Creo que el concepto o idea de profesional ha cambiado mucho desde que yo empecé a considerarme uno de ellos. Ahora la gente necesita saber más y está mucho más formada. Cuando yo era un profesional tenía que saber de lo mío y algo de lo de los demás, los profesionales éramos un poco polifacéticos. No sé cuál es mejor o cual es peor, diferente.

  • ¿Cómo se regía el mundo de la publicidad?

El mundo que yo conocí, al menos, era por pura suerte, una moneda lanzada al aire. Se trataba de que alguien te conociera, o tú conocieras a alguien. O que simplemente les gustara un trabajo tuyo y quisieran algo parecido. Nunca me considere un profesional de la publicidad, solo un espectador o un visitante ocasional, pero descubrí que era un mundo hecho para los tiburones, algo diferente a lo que yo estaba acostumbrado.

  • ¿Era habitual este tipo de propuestas a gente no profesional?

Desde la más absoluta sinceridad, no tengo ni idea – suelta entre risas – . Sólo éramos yo y un amigo haciendo algunos trabajos para sacar un dinero extra. Nunca estuve metido en el mundo de publicidad, un mundo apasionante pero demasiado exigente para que fuera capaz de aguantar su ritmo.

  • ¿Cómo le proponían los trabajos?

Era un contacto directo, o conmigo o con mi amigo Felipe, el que hacía las cuñas de la radio conmigo. Siempre era un amigo de un amigo, o un amigo a secas. Nos proponían  un trabajo, que solíamos aceptar, y no tenía mayor complicación. Casi se trataba de un juego entre amigos, una forma de pasar un buen rato.

  • ¿Qué opina de la publicidad y las cuñas publicitarias de hoy en día?

Creo que a veces los profesionales de la publicidad se complican demasiado. Soy de esas personas que piensa que la simpleza a veces es la mejor manera de hacer arte. Algunas me sorprenden, otras me decepcionan. Pero al final el mundo cambia y la comunicación con él.

  • ¿Cuándo empezó en el mundo de la publicidad?

Debía tener unos 25 años por aquel entonces. Era un joven sevillano que se había mudado a Madrid para estudiar derecho, algo que no me acabó gustando – se ríe –. Por suerte, encontré mi verdadera vocación en el periodismo, en la escritura. Mi mejor amigo de la posada de donde vivía, estudiaba conmigo, un amigo le pidió ayuda para la empresa de su padre y así comencé.

  • ¿Mientras era director de RTVE también lo practicaba?

Si, algunas veces. No de una manera tan extensa como a una edad más joven, pero sí. Me gustaba, era divertido. Un soplo de aire fresco para el día a día.

  • ¿Cómo gestiona la publicidad en RNE?

Pues la verdad, es que ha cambiado mucho desde que yo estuve ahí. Pero imagino que seguirán con patrones parecidos: depende de cuánto tiempo necesita el anunciante, a qué hora, quien protagoniza la cuña, en que programa. Es como un puzle que tienes que montar a partir de las piezas que tengas y de su color.

  • ¿Por qué fue sustituido por Luis Ángel de la viuda?

Son temas políticos, preferiría no hablar de ello.

  • ¿Alguna anécdota curiosa que crea reflejar ese entorno?

Tengo muchas, aunque ya no recuerdo la gran mayoría – se ríe – . Recuerdo una cuña para una marca de tomate, para la que estuvimos durante semanas pensando ideas, rehaciendo todo. Y ninguna le gustaba al cliente, siempre nos las echaba por la borda, estábamos totalmente frustrados. Así que cuando ya no me aguanté más, me enfade y le dije: ¿Usted qué quiere, para tomate, tomate (marca del producto)?. Y lo más sorprendente es que contestó: Sí, eso es exactamente lo que busco. Así aprendí que a veces la respuesta más simple es la correcta.

  • Sumarios:

– Cuando yo era un profesional tenía que saber de lo mío y algo de lo de los demás, los profesionales éramos un poco polifacéticos.

– El mundo que yo conocí, al menos, era por pura suerte, una moneda lanzada al aire.(…) descubrí que era un mundo hecho para los tiburones

– Creo que a veces los profesionales de la publicidad se complican demasiado

Delia Tain

2 comentarios en ““La simplicida es la mejor manera de hacer arte”

  1. Deciros que el pasado viernes 27 de enero de 2017, Rafael Ramos Losada nos dejó a los 94 años de edad. En esta breve entrevista se deja entrever el tipo de persona que era: sencillo, modesto, jovial, ocurrente y sobre todo profesional. Alguien que no quiso entrar en el juego político y que sólo tuvo interés en su profesión y su vocación de escritor y periodista. Siempre estará en el recuerdo y en el corazón de quienes, además de ciudadanos, tuvimos la suerte de tener lazos familiares con él.

    Me gusta

¿Tienes algo que decir? Te escuchamos.